lunes, 21 de marzo de 2011

Una década sin la "mili"


Fue hace diez años, y a penas unos días, cuando pasamos a un Ejército plenamente profesional desde un modelo de Fuerzas Armadas en el que un 40% de los efectivos eran reclutas cumpliendo el servicio militar obligatorio, también conocido como mili.Este paso se dio a partir de la publicación del Real Decreto 247 del 9 de marzo de 2001 que establecía la suspensión del servicio militar obligatorio, un servicio que llevaba más de dos siglos de vigencia efectiva desde su nacimiento en 1770 de la mano del Rey Carlos III y, tras progresivas reducciones y adaptaciones a los tiempos que corrían.

Según el exministro Trillo esto obedecía no solo a la “obsolencia del modelo ante la sociedad española sino a razones de orden militar, ya que, tras los avances tecnológicos y la mecanización de las Fuerzas Armadas, se necesitaba menos personal pero más especializado y con mayor disponibilidad”


Tras la suspensión en 2001 del servicio militar obligatorio, se elaboró en 2005 la Ley de Tropa y Marinería que estableciera un novedoso modelo de profesionalización basado en la estabilidad y desarrollo profesional. Ese mismo año, el Gobierno aprobó un nuevo Reglamento de Retribuciones que consolidó nuevo modelo y que representó para el soldado una mayor estabilidad.

La plena profesionalización, la renovación de los medios materiales, las reformas legales y las misiones internacionales, han sido los cuatro grandes instrumentos de modernización de las Fuerzas Armadas, que han incrementado los candidatos por plaza, una mejora en los niveles educativos de los nuevos soldados que posibilita su promoción a la escala de suboficiales y a la de oficiales.

La mili, que para varias generaciones de españoles supuso el paso de la adolescencia a la mayoría de edad, estuvo marcada por varias reformas, como ya hemos señalado, como la Real Ordenanza de Reemplazo Anual del Ejército Obligatorio, que sólo afectaba a los más pobres puesto que existian excepciones beneficiosas para quienes pudieran pagárselas; las reformas de Jose Canalejas, que obligaban a todos a hacer la mili pero reducían su duración dependiendo del dinero que pagasen por ello por la redención en metálico.

Ésta supuso , además, una seria de avances en la sociedad española, entre los que cabe destacar la enseñanza de la lectura y escritura en la época que seguía a la Guerra Civil para todos los que cumplían su deber con la patria. En relación con ello, las estadísticas disponibles constatan que entre 1940 y 1986, empezaron a notarse los efectos de la generalización de la Enseñanza General Básica, casi un millón de soldados fueron alfabetizados y otro medio millón completaron el ciclo de la enseñanza primaria.

Diez años después, el fin del servicio militar obligatorio se ha considerado como algo positivo y su plena profesionalización ha sido lo que ha hecho posible que las Fuerzas Armadas sean una de las instituciones mejor valoradas por los españoles.


Actualmente
las Fuerzas Armadas cuentan hoy con 17.759 oficiales, 28.680 suboficiales y 82.875 soldados y marineros, de los que casi 16.000 son mujeres, lo que supone más del 12% de los efectivos. España es el segundo país de nuestro entorno con mayor presencia femenina en sus Ejércitos.


3 comentarios:

  1. una decada... y estoy segura que muchos de nuestros compañeros se alegran de ello. De todas formas no parece que la gente esté menos convencida de "defender a la patria" y nuestras fuerzas armadas siguen creciendo, más en esta epoca de crisis, así que por mi que la mili obligatoria no vuelva.
    un saludo

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  2. No se puede obligar a nadie a arriesgar su vida. La carrera militar ha debido de ser siempre la alternativa vigente, una opción a escoger y no una obligación.
    Desde mi punto de vista, fomentar ese patriotismo extremo está en el origen de muchas guerras.

    Un saludo y pasaros por el blog cuando querais: http://droit-ius.blogspot.com/

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  3. Opino igual que os meus compañeiros a mili non era unha boa idea xa que o servicio militar que antiguamente separaba a rapaces de máis de 18 anos da sua familia para como decían defender a sua patria,era antes en España un deber,ahora e menos mal cos adiantos da mentalidade da sociedade esta situación cambiou e ahora e un dereito dos españoles,e como di o artigo 30.2 da nosa Constitucióin ahora consagra o dereito da objeción de conciencia,como debería haber sido sempre.

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